Hair es primero, el titulo de una experiencia única en teatro. Fue la puesta en escena de una realidad que venía marcando la agenda de la juventud americana de loa años 60′: los movimientos hippies, los no violentos, la contra-cultura escondida, el antibelicismo, la guerra en Vietnam… las batallas contra lo establecido en una sociedad conservadora, católica o protestante. A finales de esa década se convierte en una de los acontecimientos teatrales mas recordados. Y se dispara desde USA a los teatros del mundo, incluidos los de Buenos Aires, donde llega a principios de los setenta y, por supuesto, ocasiona controversias en la sociedad también conservadora (¿alguna vez no lo fue?) de Argentina. La obra y sus interpretes o mejor dicho, sus personajes, explotan en el ambiente al ritmo de melodías tan impactantes como «Acuario» o «Deja que entre el sol». En 1979, el cineasta checo Milos Forman la lleva al cine, en plena etapa de elaboración por parte de la sociedad americana, del trauma post-vietnam, con títulos ya míticos como «Apocalipsis now» (1979) o «El Francotirador» (1977). Interpretada por Treat Williams, John Savage y Beverly d’Angelo, entre otros, la versión cinematográfica potencia y mejora los puntos fuertes del original teatral, consiguiendo un resultado potente, enérgico, una feroz denuncia disfrazada tras los rasgos de musical. La escena final, uno de los momentos mas memorables de la emoción cinematográfica de aquellos años. Sin embargo, la película no alcanzó el éxito esperado. La gente ya no estaba para tanta sutileza…