Según los trabajos actuales sobre las películas más vistas del cine, más allá de las entendibles cifras recaudadas y la inflación que corresponde aplicar teniendo en cuenta los años en que se estrenaron, «LA NOVICIA REBELDE» sigue estando entre los títulos más vistos de toda la Historia. En su momento, batió récords, permaneció en salas de estreno por ¡¡¡años!!! (en la sala del Ambassador de la calle Lavalle de Buenos Aires estuvo ininterrumpidamente por dos temporadas), fue repuesta con enorme suceso hasta la irrupción del VHS y también en las televisiones de todo el planeta: un ejemplo de cine pochoclero mezclado con lo artístico que hoy resultaría imposible de pensar teniendo en cuenta los gustos actuales.

En los albores de la Segunda Guerra Mundial, sobre el año 1938, el nazismo se extiende por toda Europa: Maria es una joven huérfana que ha encontrado refugio en un convento de los Alpes. Cuando la envían a cuidar a los hijos de un poderoso militar viudo, su vida cambiará para siempre. La película se inspira en un musical de Richard Rodgers y Oscar Hammerstein II estrenado en 1959 que a su vez lo hizo de un libro de enorme suceso publicado en 1949 y escrito por la protagonista Maria von Trapp, llamado «La historia de los cantantes de la familia Trapp». Esta mujer nacida en Austria en 1905 narró su experiencia vital desde un tinte donde lo religioso y lo musical señalan el sentido de su mirada sobre un tiempo tan complejo como su propia vida personal: huérfana, criada por monjas, institutriz de una familia acomodada que acaba saltando barreras sociales al casarse con el padre de sus educados, fugitivos todos del espanto nazi, exiliados en Italia y finalmente EE.UU. donde desde su autoridad y dirección convertirá al grupo en un famoso conjunto musical que llegó a compartir escena con el mismísimo Elvis Presley. Material para una ficción a partir de un relato autobiográfico que se convirtió en uno de los sucesos mas grandes de la posguerra.

Julie Andrews nació en Inglaterra en 1935 y desde niña trabajó junto a sus padres en escenarios del music hall y vodevil británico alcanzando un nivel estelar que le permitió triunfar primero en los teatros de Nueva York desde 1954 (protagonizó tres obras legendarias del musical: «El Novio» (1954), «My fair lady» (1956) y «Camelot» (1961) y luego a partir de 1964 («Mary Poppins», Oscar a la Mejor Actriz) en el cine. Su nombre atravesó la cinematografía global a partir de dos mega-éxitos como fueron sus primeras películas y a partir del fracaso de sus últimos trabajos en 1969 inauguró una nueva etapa como estrella de show televisivo y apariciones esporádicas en algunos films, como los exitosos «Diez, la mujer perfecta», «Victor Victoria» o las dos partes de «Princesa por sorpresa». Dueña de un registro vocal extraordinario y de una calidez en sus interpretaciones, de alguna manera estas cualidades eclipsaron otras intenciones de la actriz-estrella: ser reconocida en obras ajenas a estos personajes y donde  pudiese demostrar sus dotes dramáticas.En todo caso una carrera  llena de películas excelentes y donde logró la difícil tarea de consagrarse como figura única entre sus contemporáneas. Una de las grandes clásicas del cine.

El título original de la película, el sonido de la música, es mucho más elocuente que el fácil utilizado en el exterior porque evoca el sentido final de la obra: una historia donde las letras de las canciones refiere a sentimientos profundos de la protagonista. Porque es la música y no la danza quien protagoniza la trama, que en manos de un experimentado cineasta como Robert Wise alcanza valores cinematográficos rara vez valorados por la crítica especializada, producto digno de todas las descalificaciones posibles. Sin embargo con el paso del tiempo, una nueva generación de escritores de cine ha presentado el debate sobre estas cuestiones y la película hoy se mantiene vital y reconocida, como no lo fue en su época. La dirección de cámara, la fotografía, los movimientos puramente cinematográficos, hablan de un film y no de una obra de teatro filmada, error lamentable que muchos originales conocieron en su paso a la gran pantalla.En todo caso un género como otros desestimado en el presente que presenta para los amantes del cine un desafío a la hora de enfrentarse a el. Para intentar quitar, o no, prejuicios de mucho tiempo. Una película sencillamente extraordinaria.

«LA NOVICIA REBELDE» / THE SOUND OF MUSIC/ EE.UU.-1965 / Director Robert Wise / Intérpretes Julie Andrews, Christopher Plummer, Eleanor Parker, Charmian Carr, Peggy Wood / Color / Versión original con subtítulos en castellano / Duración 2hs.50 minutos con intervalo de 10 minutos.